POR
Por Félix Barceló Garroni
Michael Jackson, el mejor artista de todos los tiempos, quería ser un ser eterno. Sin embargo, el Rey del Pop murió prematuramente a raíz de esa búsqueda de su "paz interior".
Michael fue siempre una persona que fuera del escenario parecía ser tímida e introvertida, e inclusive, de alguna manera, transmitía paz y tranquilidad al hablar.
Sin embargo, su bondad no sólo se reflejaba en su manera de hablar, sino que su vida también se centraba en ayudar a la gente y tratarla con amor, e inclusive muchas de las letras de sus canciones llevaban ese mensaje de paz y armonía para el mundo.
Pero, lamentablemente, la historia del Rey del Pop no fue tan armoniosa y pacífica como él la hubiera querido, y en su eterna búsqueda de esa paz interior y salud física y mental, el artista muchas veces cayó en excesos, los cuales no supo ni pudo controlar, y que poco a poco lo llevaron prematuramente a la muerte, a los 50 años de edad, cuando aún tenía mucho que ofrecer.
Michael Jackson siempre quiso ser eterno, porque era un ser extraordinario y especial.
Pero en esa búsqueda, contradictoriamente, en vez de encontrar la paz y la eternidad, encontró problemas, hasta el final de sus días.
0 comentarios:
Publicar un comentario