"This Is It", triunfo desde el más allá

Univision.com
Por Julio García, Univision.com

This Is It terminó siendo el mejor epitafio posible para el rey del pop. El documental de Kenny Ortega muestra a Michael Jackson en plena forma, listo para reconquistar al mundo que a veces le dio la espalda. Sin caer en sentimentalismos, la película pone de relieve la capacidad artística del cantante, que prometía un espectáculo fabuloso, que su muerte no permitió concretar. This Is It se estrena el 28 de octubre.

Mejor de lo que esperaba

La película comienza con declaraciones frente a cámara de los bailarines escogidos por Michael Jackson para acompañarlo en la frustrada gira. Varios de ellos eran seguidores del cantante y algunos estaban demasiado emocionados para poder hablar con coherencia. Como introducción, sirve para darle esa emotividad sin exageración a un documental que nos deja el sabor agridulce de lo que habría sido un éxito a todo nivel, mejor de lo que esperaba. Nos hemos perdido una gira extraordinaria.


Después vemos a Michael con sus anteojos oscuros, al lado del director Kenny Ortega, dando opiniones y hablando suavemente con expresiones como "que Dios te bendiga", alternadas con los ensayos propiamente dichos, en por lo menos cuatro atuendos distintos. Lo que iba a ser un material personal en video para el cantante ha sido eficazmente editado como un triunfo desde el más allá. Uno siente que el ídolo caído por sus escándalos se levantó para reclamar su sitio entre los grandes y no hace falta ser fan para afirmarlo.

Hay que aclarar que no hay muchos primeros planos de Michael Jackson, de manera que no queda tanto en evidencia el daño causado a su rostro en los últimos años. Eso beneficia su actuación, pues nos concentramos en el artista consumado que siempre fue y lo bien que conocía cada fragmento de su música. Incluso con su voz débil y aniñada, vemos al eterno adolescente ejercer su autoridad a su manera y hasta reclamar que no le hagan forzar la garganta.

Lo que prometía ser un excelente show queda en evidencia con toda la preparación: no se trataba simplemente de organizar una coreografía en el escenario, no extenta de efectos especiales y juegos pirotécnicos. Para enfatizar la relevancia de la carrera de Jackson, se usaban imágenes de su época como el pequeño Michael de los Jackson 5. Como introducción a la canción Smooth Criminal hay un montaje de la película Gilda, de 1946, en el que alterna ficticiamente con Rita Hayworth, Humphrey Bogart y Edward G. Robinson, en un pequeño homenaje a la edad de oro de Hollywood y a los musicales que tanto disfrutaba.

Vemos a Michael Jackson ensayar y ensayar sus coreografías, sacando el máximo provecho de sus músicos e incluso dando un mensaje ecologista, también haciendo uso de una pequeña película para ser proyectada detrás del escenario. Evidentemente, estando allí, en su terreno, sabía lo que hacía y hubiera merecido concretar una gira que lo habría puesto de nuevo en los primeros lugares. Irónicamente, fue su muerte la que logró eso, pero este documental es una celebración de su vida sin el morbo de su desaparición. Para quitarse el sombrero y bailar el moonwalk.

¿La viste? ¿Qué te pareció?